
En el ámbito de la seguridad personal, es fundamental tener conciencia de nuestro entorno y estar preparados para hacer frente a situaciones potencialmente peligrosas. El sistema de los «Colores de Cooper», desarrollado por el coronel Jeff Cooper, proporciona una estructura útil para evaluar y adaptar nuestros niveles de conciencia en función de las amenazas que enfrentamos. A continuación daremos algunas aspectos y ejemplos de los diferentes niveles de conciencia de los Colores de Cooper y cómo pueden ayudarnos a tomar decisiones informadas y garantizar nuestra seguridad.
Nivel Blanco – Inconsciencia: es nivel de conciencia más bajo, caracterizado por la falta de atención y la falta de percepción de los riesgos circundantes.
Ejemplo: Estar absorto en el teléfono móvil mientras se camina por una calle concurrida sin prestar atención a posibles peligros, como vehículos o personas sospechosas.
Nivel Amarillo – Atención relajada: un estado de atención relajada y consciente de los posibles riesgos.
Ejemplo: Caminar por un parque observando a las personas a su alrededor, notando cualquier comportamiento inusual o actitudes amenazantes.
Nivel Naranja – Atención focalizada: estado de alerta activa ante una amenaza inminente o potencial.
Ejemplo: Entrar en un estacionamiento oscuro y notar a una persona sospechosa que parece seguirlo discretamente, lo cual genera una preocupación legítima.
Nivel Rojo – Acción: tomar medidas concretas para responder a una amenaza.
Ejemplo: Enfrentarse a una situación de robo a mano armada, donde se toma la decisión de desarmar al agresor o buscar refugio y notificar a las autoridades.
Conocer lo niveles de estado de conciencia son una herramienta valiosa para aumentar nuestra atención circundante y preparación en términos de seguridad personal. Al estar conscientes de los niveles podremos adaptar nuestro estado mental según la situación, podemos tomar decisiones informadas y mitigar los riesgos potenciales. Mediante ejemplos y escenarios prácticos, podemos comprender mejor cómo aplicar los Colores de Cooper en situaciones reales, lo cual nos permitirá proteger nuestra integridad física y bienestar en todo momento. Es fundamental practicar y aplicar regularmente a todas las situaciones de nuestro día a día los Colores de Cooper para desarrollar una mentalidad de seguridad y estar preparados ante cualquier eventualidad.